Camino a casa

En el momento en que esto se publique estaré volando a casa. He pasado en Río de Janeiro unos meses maravillosos.

La visita frecuente de familia y amigos, más la cordialidad extrema con que me han tratado los cariocas, han hecho que me sienta aquí como en mi hogar.

Esta ha sido para mi una experiencia extraordinaria, tanto en el plano personal como profesional.

Ya quiero volver a casa, porque mi lugar es donde están Marisa y los chicos, pero extrañaré Copacabana (mi barrio, naturalmente), Ipanema, Botafogo, Flamengo y todos esos rincones de Río que constituyeron mi cotidianidad allí.

Mi agradecimiento hacia Río de Janeiro por esta experiencia es enorme. Particularmente hacia la gente del Programa de Computação Científica (PROCC)  de Fiocruz, quienes componen un lugar de trabajo extraordinario.

Los almuerzos y cafés con Monica, Aline y Luciane (entre otros tantos más) son inolvidables. Y los “café da manhá” a los que he asistido, con muchos de los cuales ni siquiera sé los nombres, fueron muestra concreta de la amabilidad carioca.

Y por supuesto, le debo una inmensa gratitud a Ernesto Caffarena, con quien trabajar es un placer, pero mayor aún es el de recorrer todos los lugares por los que anduvimos, compartiendo buenas charlas, música, fotos, gastronomía o simples y largos silencios admirando paisajes.

No puedo dejar de agradecer al CONICET, ya que pude realizar esta experiencia gracias a la Beca que generosamente me ha otorgado.

Claro está que no es un adiós, sino sólo un hasta pronto. Até mais…

La misma imagen, pero con mayor resolución, puede bajarse de aquí.

Manuel Carlevaro
Manuel Carlevaro
Investigador en CONICET - Profesor Titular UTN

Usualmente desconocido como ManuX

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